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La importancia del flujo de efectivo

Mauricio Priego 27/Jun/2011 11

El Flujo de Efectivo

¿Has escuchado a alguien – o a ti mismo – decir que el dinero no le alcanza? A mediados del siglo pasado Chava Flores, gran compositor mexicano de música popular, dio a conocer “La Bartola”, canción en la que el protagonista le deja a su esposa dos pesos con los cuales debía pagar la renta, el teléfono y la luz, tomar para el gasto, y guardar el cambio para comprarle unas cervezas.  (Si quieres escuchar la canción, sigue esta liga)

Si bien nuestra moneda no estaba tan devaluada como ahora, la realidad es que ni en esa época dos pesos alcanzaban para tanto, siendo realmente una canción de crítica social en la que se exponía los esfuerzos que tienen que hacer las familias para estirar el gasto. Ese esfuerzo, lejos de reducirse, ha ido en constante incremento, aún cuando es normal en nuestros días que en las familias trabajen tanto el hombre como la mujer… y en muchas ocasiones en más de un trabajo.




Pero, ¿por qué no nos alcanza el dinero?

La primera respuesta que pasa por la mente de cualquiera es Porque no es suficiente o Porque todo está ya muy caro. ¿Y sabes que es lo interesante? ¡Que la respuesta es la misma independientemente del nivel de ingresos de la persona a la que se le pregunte! Todos sabemos el dicho: Quien gana más, gasta más.

Por tanto debe haber algo más… y lo hay. El dinero es una herramienta que trabaja cuando cambia de una mano a otra, lo cual se llama flujo de efectivo. El proceso natural es: requieres un producto, das el importe solicitado por su propietario y el producto es tuyo. Sin embargo, el ser humano, ávido de facilitar los procesos, creó dos conceptos que afectan el flujo natural del efectivo: el endeudamiento y las inversiones.

Efecto del endeudamiento – Cuando te endeudas, sin importar si es a través de créditos o préstamos, comprometes dinero futuro en un plazo determinado. Esto provoca que no tengas que utilizar dinero que en ése momento tienes en las manos para adquirir ese producto o servicio, lo cual genera una falsa sensación de libertad, de fluidez, ya que es común que entonces se utilice ese dinero para otros pagos. El problema se presenta cuando se cumple el plazo requiriéndose para cubrir la deuda. Es entonces cuando descubrimos que nuestro flujo ha sido afectado: nuestros gastos de siempre siguen ahí, pero tenemos que dividir lo que teníamos para poder pagar las deudas. ¿Y que hacen muchas personas? Adquirir nuevas deudas para adquirir los productos que necesitan y así disponer del dinero (del flujo de efectivo) para pagar sus deudas anteriores. ¡Y peor aún! Hay quienes solicitan préstamos y créditos para poder pagar sus deudas.

Efecto de las inversiones – El ahorro y la inversión son hábitos que debemos adquirir y promover. Son la fuente de la verdadera Libertad Financiera. Sin embargo, los ahorros a plazo fijo, los fondos de inversión, la compra de divisas (monedas extranjeras), casas o automóviles, pueden llevarnos a quebrantos financieros de no tener una estrategia adecuada. Esto sucede porque el dinero deja de fluir para quedarse “atrapado” en la inversión, por lo que, de necesitar el dinero, no puedes utilizarlo. Supongamos que se invierte en la compra de una casa para darla rentada y, antes de que tengas algún inquilino, aparece un gasto que no tenías contemplado y no puedes evitar. El doctor y el señor de la tienda no aceptarán un pedazo de la casa, por lo que muchas personas terminan endeudándose para cubrir sus gastos con la idea de pagarlas cuando la inversión genere dinero, lo cual no siempre sucede de forma oportuna. Adicionalmente existe el riesgo de minusvalía en algunos tipos de inversiones como las divisas, es decir, como su precio fluctúa con el tiempo, puede darse el caso de que, al momento de requerir vender esas monedas o billetes, ¡cuesten menos de como se compraron!, con lo cual perdiste dinero.

Entonces, ¿cómo podemos proteger nuestro flujo de efectivo? ¿Qué puede hacerse para no quedarnos sin dinero a mitad de la quincena? Estas son algunas ideas que podrían ser de utilidad:

  • Escoge una libreta, aquella que te resulte cómoda y atractiva, considerando que será tu principal arma personal para la gestión de tu flujo de efectivo. No hay problema si prefieres Excel u otra hoja electrónica de cálculo, lo importante es que la tengas a la mano, que no te resulte problemático el consultarla o hacer anotaciones rápidas en ella, y que no la uses para otros objetivos.
  • Adquiere el hábito de hacer un presupuesto, es decir, determina cuánto dinero recibes y cómo distribuirás dicho ingreso entre el ahorro, tus gastos y el pago de deudas. Cada nuevo período de ingresos es un nuevo presupuesto en una nueva hoja de tu libreta. (Para mayor información consulta el artículo 10 Consejos para la elaboración de tu presupuesto)
  • Cada vez que compres algo a crédito, añade el futuro gasto al presupuesto del período donde tendrás que pagarlo. Esto te dará la visibilidad y sensibilidad real de cuánto de tu flujo futuro has comprometido.
  • Si tus ingresos no superan tus gastos con un margen de un 5% cuando menos, entonces no es el momento de endeudarse, así la promoción sea buenísima, el producto sea la que siempre has buscado, o consideres que las facilidades de pago no debieran perderse.
  • Hablando de facilidades de pago: los meses sin intereses, los pagos fijos y los cargos diferidos (“Compre hoy y no comience a pagar hasta 3 meses después”) son los créditos más complejos de administrar en cuanto a flujo de efectivo, ya que normalmente son pequeños y se prolongan en el tiempo. En tu libreta separa una sección para este tipo de créditos, indicando cuando te hacen el primer cargo, cuando el último y cuanto tienes que pagar en cada período.
  • No olvides, cuando en tu libreta comiences un nuevo presupuesto, consultar la sección de Facilidades de Pago para registrar inmediatamente los pagos que debas realizar.
  • Procura ser más fuerte que tu impulso a comprar: una de las principales causas de abandonar el hábito de la elaboración del presupuesto es que éste termina no cumpliéndose al gastarse el dinero (y muchas veces más del que uno está dispuesto a aceptar) en productos distintos a los que se había planeado. El principio es simple: si es el cumpleaños de tu pareja y no separaste el dinero para una maravillosa cena romántica, ¡no uses el dinero de las colegiaturas de tus hijos! No olvides que el romanticismo lo pones tú sin importar el total a pagar, así que lleva a tu pareja a donde la cuenta sea realista en cuanto al dinero del que dispongas.
  • Es posible que más de uno piense en este momento: “Todo esto es muy bello, pero, ¿y las emergencias?” Y tienen toda la razón: hay que considerarlas.
    • Crea un fondo para Emergencias, destinando una cantidad fija en cada presupuesto. De dos a cinco pesos de cada 100 es un buen principio.
    • Considera adquirir un seguro para tu auto (cuando menos daños a terceros) y la casa. Existen diversos modelos al alcance de todos los bolsillos.
    • Un seguro muy útil es el de responsabilidad civil, el cual permite que, si algún miembro de tu familia rompe algo caro en casa de un vecino o en una tienda, el seguro lo cubra. La buena noticia es que muchas veces está incluido en el seguro de la casa.
    • No dudes en situaciones realmente críticas buscar el apoyo de organismos y asociaciones que apoyan casos semejantes al tuyo (Sólo como ejemplo: Vifac – Apoyo a la mujer embarazada en desamparo)
  • Establece tu estrategia de ahorro e inversión de acuerdo al tiempo que falta para utilizar tus recursos, así como el objetivo que darás a esos recursos:
    • Cuentas de ahorro de acceso inmediato: El dinero del gasto diario, fondo de emergencias.
    • Cuentas de ahorro o inversión de vencimiento diario: Provisiones de pagos periódicos como luz, plan del celular, servicio de televisión de paga, colegiaturas.
    • Ahorros e inversión a plazo fijo, fondos de deuda: Dinero que separas para proyectos futuros: tu casa, el coche, la boda, los quince años de tu hija.
    • Inversión en activos (casas, terrenos, fondos de renta variable, acciones), divisas (monedas extranjeras) y metales preciosos: Dinero que destinas específicamente a la inversión y que no requerirás cuando menos en el plazo de un año. ¿Podrías poner en estos instrumentos un fondo para los estudios universitarios de tu hija que ahora tiene 5? La respuesta es sí, pero estas inversiones tienen el riesgo de minusvalía (que el valor baje en vez de subir), así que, si no tienes experiencia, es mejor que te acerques a un asesor financiero.
  • En las inversiones, el peor enemigo es la avaricia: Muchas veces, por los rendimientos que está dando algún fondo de inversión, acción o divisa, se pone ahí todo el dinero… incluido el del gasto del día a día o los pagos periódicos como las colegiaturas. Por tanto, mantén la cabeza fría e invierte sólo lo que previamente destinaste a ello.
  • Por ningún motivo te endeudes para tener dinero para invertir. Si revisas la historia de los inversionistas que se suicidan en las crisis financieras, el haberse endeudado para comprar más acciones usualmente está detrás. Igualmente hay muchos ejemplos de personas que compraron una casa, terreno o coche para revenderlos, teniendo finalmente que deshacerse de ellos a un precio muy bajo por requerir de forma imperante el dinero. (IMPORTANTE: Existe el concepto de Apalancamiento Financiero el cual es válido habiéndolo usado alguna vez yo mismo, pero ésta herramienta es una excepción a la regla aquí expuesta. Si piensas usar el apalancamiento por primera vez, mejor apóyate en un asesor financiero honesto).

El flujo de efectivo es uno de los principales indicadores que nos hablan de que tan saludables se encuentran tus finanzas personales o familiares.  ¡Éxito!

Este artículo fue publicado por primera vez en practifinanzas.com. Si tienes interés en compartirlo publicándolo en tu blog o página web (reblogging), por favor sigue esta liga.
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11 Comentarios »

  1. Yazmin 25/Nov/2015 en 3:40 am - Responder

    Hola Mauricio
    Te felicito por las lecciones que nos das… sigo varios blogs de finanzas personales pero sin duda, el que me mas me gusta es el tuyo: tu trato hacia la gente, la forma analítica de abordar los temas, las recomendaciones que realizas, etc.
    Es el primer caso donde encuentro que se recomienda integrar los flujos de efectivo futuros por concepto de MSI al presupuesto de pagos del mes correspondiente, aunque pudiera ser algo obvio, no simpre lo mencionan y el hecho de incluirlo refleja seriedad y profesionalismo y un real conocimiento del tema (dificil de encontrar en algunos pseudo- asesores financieros)
    Gracias!!
    Yazmin

    • Mauricio Priego 26/Nov/2015 en 6:47 am - Responder

      Muchas gracias Yazmin, sinceramente aprecio mucho tus palabras.
      Son un aliciente para seguir adelante con nuevos bríos 😀
      ¡Éxito!

  2. Elizabeth Padilla 13/Feb/2015 en 1:18 pm - Responder

    Hola Mauricio: Un ejemplo excelente de como los meses sin intereses desbalancean tu presupuesto son las compras de juguetes en navidad a 18 meses sin intereses, seis meses antes (o nueve, si son de las promociones de «comience a pagar hasta abril) de que termines de pagar los juguetes de tus hijos vas a sacar una nueva promoción a 18 meses para los juguetes de la siguiente navidad. No se diga los 12 meses sin intereses en el departamento de bebidas, ¿a quien se le ocurre pagarse la borrachera de una noche durante 12 meses? esa cruda va a ser mayor que la de la borrachera.

    • Mauricio Priego 16/Feb/2015 en 7:15 am - Responder

      Hola Elizabeth, ¡no se me había ocurrido la ejemplificación con la borrachera! Realmente muy oportuna, gracias por compartirla 😀

  3. Talia Fuchok 24/Ene/2014 en 3:47 pm - Responder

    No funciona la liga de 10 consejos para la elaboración de tu presupuesto.!!

    • Mauricio Priego 27/Ene/2014 en 9:55 am - Responder

      Talía, gracias por avisarme. Ya corregí la liga 🙂

  4. Talia Fuchok 24/Ene/2014 en 3:39 pm - Responder

    Muchas gracias X la información. Empiezo hoy con tus consejos!

    • Mauricio Priego 27/Ene/2014 en 9:49 am - Responder

      Talía, me alegra que la información te haya sido de utilidad.
      ¡Éxito con tus proyectos! 😀

  5. monzhyta ramirez 03/Mar/2012 en 8:23 pm - Responder

    por favor pongan las epocas alas que corresponden las canciones de cada autor gracias

    • Mauricio Priego 04/Mar/2012 en 10:25 pm - Responder

      Supongo te refieres a «La Bartola» de Chava Flores, a la cual hago referencia en el inicio del artículo. Esta canción se cantó por primera vez en la radio en 1952.

      Si deseas mayor información sobre la biografía de Salvador Flores Rivera y su repertorio musical, te recomiendo consultar el portal de la Sociedad de Autores y Compositores de México (http://www.sacm.org.mx/archivos/biografias.asp?txtSocio=08558)

      ¡Éxito!

  6. Garessi03 18/Feb/2012 en 5:08 pm - Responder

    Es relmente interesante el poder ubicar la salud de tu «Flujo de Efectivo» a travéz y, siguiendo, paso a paso, los consejos que tan verázmente presentó usted en el presente artículo, PERO, es aterrador, el constatar que la «Terapia Intensiva» en la que se encuentra tu bolsillo es agonizante. Ahora bién, el esfuerzo requerido para ‘sanar’ dicho padecimiento, valdrá la pena y, se verá reflejado al ya no sentirte ahogado y al empezar a respirar aire puro nuevamente. Se luchará por ello.

    ¡GRACIAS!

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