Hace poco me preguntaba una persona muy cercana, la cual rebasó ya hace algunos años la edad de jubilación, cómo podría lograr incrementar sus ingresos. Y es que si bien la generación de ingresos es la primera de las habilidades financieras ya que fundamenta todas las demás (planeación, ahorro, inversión, financiamiento y protección del dinero), es quizá la que mayor reto representa a la hora de desarrollarla… sin importar la edad que tenga la persona. Hoy platicaremos de este tema, el cual es crucial para las finanzas personales.
Hagamos primero un pequeño ejercicio para evaluar el alcance de este reto:
¿A cuántas personas conoces que su fuente de ingresos sea trabajar para alguien más? Seguramente a muchas, y hasta habrá quien tenga dos o tres empleos. ¿A cuántas más conoces que sean sus propios patrones o que tengan un negocio? Seguramente también serán muchas, pero menos de las que viven de su empleo. ¿Y a cuántas personas conoces que tienen negocios exitosos en diferentes giros, que tal pareciera que las oportunidades los buscan, que cual modernos reyes Midas convierten en oro todo lo que tocan viviendo de sus inversiones? Seguramente muy pocas.
Ahora bien, al preguntarle a las personas cuál es principal motivo por el cual no ahorran o por el cual se endeudan, normalmente afirman que es porque el dinero no les alcanza, lo cual les impide ahorrar obligándoles a echar mano de la tarjeta de crédito. Al no ser suficiente el dinero que ganan, no planean sus gastos ya que no encuentran sentido en distribuir lo que no tienen. Y al no tener dinero ahorrado, no cuentan con un capital para poder invertir.
¿Qué podemos concluir de este ejercicio? Quizá que la mayoría de las personas encontramos una forma de ganarnos la vida y nos apegamos a ella, ya sea vivir de nuestro empleo (o empleos), de ofrecer nuestros servicios (desde el médico hasta el albañil independientes) o de nuestro negocio. Y si bien es cierto que hay quienes cambian de fuente de ingresos (empleados que se independizan, emprendedores que al quebrar su negocio buscan empleo), normalmente se apegan a esa nueva fuente sin avanzar en la búsqueda de diversificar sus ingresos.
Y si prácticamente todos reconocemos que nuestros ingresos no son suficientes, entonces ¿por qué no desarrollamos esta habilidad y nos enfocamos en diversificar nuestros ingresos? Los primeros motivos que me vienen a la cabeza son:
- la falta de dinero,
- la falta de tiempo,
- el no haber recibido en casa una educación que fomente la habilidad de generar ingresos.
Y es que aunque muchos padres buscan inculcar a sus hijos el ahorro, enseñándoles con el ejemplo a endeudarse aún sin darse cuenta, no es común que a los niños y adolescentes se les enseñe a generar ingresos, en parte porque existe cierto tabú al respecto considerándolo como una forma de explotación infantil, por otra porque los propios padres no hemos desarrollado esta habilidad.
Pero, ¿éstos son todos los motivos? ¿Consideras que hay otros quizá más importantes? ¿O cómo estos motivos se conjugan en tu caso en particular limitando tu habilidad para generar nuevos ingresos diversificando así los existentes? O mejor aún, ¿cómo has logrado diversificar tus ingresos?
En esta ocasión necesito de tu colaboración. Por más ideas que pudiera yo aportar van a estar limitadas a mi experiencia y a la de aquellas personas con las que he tenido la oportunidad de platicar. En cambio, si nos compartes tu punto de vista y tu experiencia personal, las conclusiones que podremos sacar serán mucho más enriquecedoras para todos.
Así que por el momento finalizo este artículo, comprometiéndome a publicar en uno próximo las experiencias, ideas y conclusiones compartidas por quienes decidan participar en este esfuerzo.
No lo dudes… ¡Participa y déjanos tus comentarios!
Bueno, hay muchos ejemplos y reflexiones muy interesantes, tanto en el cuerpo como en los comentarios de esta entrada.
Para no ser redundante en los planteamientos quisiera aportar una nueva perspectiva a la discusión. Una perspectiva que generalmente se hace a un lado por su obviedad, pero que es fundamental al momento de planear nuestras finanzas.
Preguntémonos ¿para que queremos el dinero? Y luego determinemos ¿cuanto dinero necesitamos? Esta segunda pregunta me parece fundamental, porque pareciera que alguien nos dijo que entráramos en una carrera interminable de generar y gastar.
Cuando entendemos exactamente lo que queremos obtener entonces podemos con más facilidad desarrollar un plan para alcanzarlo. Sin ese objetivo claro seguramente siempre seremos presa de la frustración.
Carlos, no pude dejar de pensar en los comentarios de Teresa al leer los tuyos.
Ella comenta que hoy, después de haber conseguido sus objetivos, ya no piensa más en el dinero. Es decir, siguió un camino semejante al que propones… y hoy es feliz.
Tienes razón en que no se debe entrar en una carrera interminable de generar y gastar, ya que el enfocarse en el dinero es por sí mismo un error: el dinero es tan solo una herramienta. Es como si al querer colgar un cuadro te concentraras en el martillo en vez de cómo el cuadro embellecerá la habitación.
Sin embargo, no hay que perder de vista que, mientras no hayas logrado colgar el cuadro, necesitas del martillo.
Hola a todos,
Coincido con muchos de vuestros comentarios. Es cierto que en primer lugar hay que gestionar el gasto e intentar generar algo de ahorro para poder iniciar nuevas aventuras, pero esta no la pregunta que nos plantea Mauricio.
La cuestión es: «El reto de generar un nuevo ingreso»
Creo que hay que hacer una planificación a medio/largo plazo.
– Definir nuestras fortalezas y debilidades (DAFO/FODA) http://www.sapiensco.com/blog/2011/08/09/%C2%BFcuales-son-tus-recursos-el-dafo-personal/
– ¿Cuáles son tus ventajas con respecto a otros?
– ¿Qué cosas haces bien?
– ¿Qué es lo que otras personas ven como tus fortalezas?
– ¿Cuáles son tus debilidades?
Aprovecha unas y mejora las otras con formación.
No tengas miedo. Confía en tus posibilidades. Esfuerzo, constancia, humildad, paciencia.
Define un segmento de mercado al que te quieras dedicar. Si es hipersegmentado mejor.
Haz networking tanto en la vida real como en redes sociales. Aprovecha todos los medios a tu alcance para expandir tus redes de contactos, entendiendo que cada contacto puede ser una oportunidad.
Ve a todo tipo de reuniones, eventos, convocatorias, cursos, charlas … tanto sectoriales como de cualquier otro tipo.
Piensa que las oportunidades de negocio o tus servicios profesionales pueden venir de cualquier sector, preferiblemente donde no tengan contacto con personas como tu. Conocerás a gente muy interesante. No te centres en eventos solo dedicados a personas con tu perfil. Ábrete a nuevas experiencias, a nuevas personas.
Comparte conocimientos, se generoso, da sin esperar nada a cambio…. la vida te lo devolverá.
Las oportunidades de nuevos ingresos pueden venir de la mano de las personas más inesperadas, en los momentos más insólitos. Por eso tienes que estar preparado y estar allí.
Suerte!!
En primer lugar a la mayoría se nos ha educado en las aulas y también en nuestras casas para ser empleados. «Estudia para que consigas un buen trabajo» nos repetían hasta el cansancio nuestros padres. Y creo que eso aun no ha cambiado mucho. Desde ahí al niño, al joven lo van «programando» para ser eso, empleado, truncando asi muchas de sus habilidades que seguro tiene como individuo. ¿Cuantos grandes artistas no conocemos porque sus papás los ridiculizaban con frases como «te vas a morir de hambre con eso»? Es un ejemplo de muchas cosas que van minimizando las capacidades del ser humano… Por otro lado tenemos la zona de «confort» que es lo mismo que «no al cambio». O sea, a veces TEMEMOS hacer algo diferente por miles de dudas que luego nos surgen y nos susurra una voz interior. ¿Cuantas habilidades habrá sin explotar en las personas y que perfectamente podrían vivir de eso? Yo creo que si haces lo que te gusta, en lo que eres bueno, y además te pagan por eso ¡está bien! Yo soy empleado, me gusta mi trabjo, lo hago con ganas y bien hecho, estoy cómodo. Sin embargo al ir juntando capital (ahorrando) no me agradaba la idea de que ese dinero lo esyuviera usando el banco para sus negocios sin yo ganar un centavo así que busqué alternativas que se adecuen a mi personalidad. El resultado es que empecé a invertir tanto en deuda (cetes) como en la Bolsa Mexicana de Valores negociando acciones y fondos de inversión. Mi idea general (mi ejercicio de imaginación) es más adelante poner un negocio, tipo franquicia muy probablemente, uno o dos según como vaya progresando. No atenderlo yo directamente sino yo administrarlo y yo seguir inviertiendo una parte en Bolsa. Finalmente con altas probabilidades de dejar mi empleo actual, no porque no me guste, sino porque me gusta hacer nuevas cosas cada cierto tiempo, descubrir habilidades que no sabía que tenia, etc. Yo creo que el temor es un poderosísimo impedimento. El segundo es la falta de confianza en uno mismo. Si las demás personas confian en ti, en tus aptitudes y habilidades pero tú no confias en ti mismo estás frito.
Fernando, que gran razón tienes…
Muchos no se consideran aptos para emprender viviendo de sus empleos… Pero si están en esos empleos, es porque alguien más sí los considera aptos.
Es claro que se requiere desarrollar habilidades que no se tienen… pero para prosperar en la vida… ¡es más, la vida misma!, requiere del continuo desarrollo de habilidades nuevas.
Mi madre suele decir que envejecemos en el momento en que dejamos de aprender… Tiene 70 años y cada día nos sorprende con un conocimiento nuevo 😉
En lo personal puedo decir que soy el caso de los que tenemos 2 trabajos. Sin embargo, estoy buscando la forma de tener mas ingresos por medio del Internet. Me declaro novato en esto de los negocios en Internet (los cuales hay varios tipos), estoy aprendiendo y he cometido errores que se me están llevando al éxito. También voy algo lento ya que también requiere inversión y hay veces que no hay para invertir. Precisamente esta es una de las razones por las cuales creo que no nos atrevemos a emprender algún tipo de negocio, el miedo a disponer nuestro dinero que proviene del sueldo de nuestro(s) empleo(s) para invertir. Miedo ya que no queremos desembolsar ya que, si no funciona, vamos a perder ese capital que tanto nos esforzamos en ganar.
Tengo la inquietud de aprender a invertir en opciones tales como la bolsa de valores, fondos de inversión, etc., sin embargo, por desconocimiento y por falta de capital, no me ha atrevido. Es decir, ¿como hacerle para sacar un capital para invertir cuando se vive casi casi «al día»? Saludos y bendiciones.
Alex, gracias por tu honestidad.
Como ya han mencionado muchos de los participantes en este post, el miedo es uno de los primeros ingredientes para no lograr diversificar tus ingresos. Es cierto que se requiere de capital… y también es cierto que hay formas de buscar financiamiento a través de diferentes apoyos y estímulos, como bien menciona Alberto López.
Sobre tu inquietud, la mejor manera de empezar es generando un fondo de ahorro destinado a convertirse en tu capital para inversión. Desconozco tu situación personal, pero podrías empezar con CETES (puedes abrir tu cuenta desde 100 pesos) e ir incrementándolo de forma constante y periódica. Llegados a los 5-10 mil pesos puedes pasar a Fondos de Inversión para tener mejores rendimientos. Mientras tanto puedes irte auto-capacitando leyendo sobre temas de inversión para estar preparado.
Si gustas contáctame directamente y con gusto podemos revisar un camino acorde a tu realidad específica.
¡Éxito!
Gracias Mauricio por tu interés en asesorarme. Con gusto te contacto pronto para platicar del asunto. Bendiciones y éxitos.
Cualquiera que haya sufrido un despido alguna vez, habrá vivido en carne propia lo que significa tener todo tu sustento en «una sola canasta». Es horrible quedarte sin tu fuente de ingresos de un día para otro.
La diversificación de las entradas es tan importante como la diversificación de las inversiones o el ahorro. Alguien arriba comentó que no hacía falta diversificar ingresos si se aprende a ahorrar. Pienso que el ahorro por si solo no es suficiente. Y este tiene la maldita manía de acabarse cuando no hay ingresos! aunque gastemos poco.
En mis épocas de empleada conviví con muchos compañeros frustrados y hartos de sus trabajos, pero que permanecían ahí porque «no había otra opción». Está de mas decirles que de un parque de diversiones, no quedó ninguno. Todos fueron corridos en algún momento.
Desde mi muy humilde punto de vista, quien no diversifica sus ingresos pone en muy alto riesgo su patrimonio. Siempre se puede hacer otra cosa, y siempre hay «otras opciones». Que no se nos cierre el mundo, y entonces podremos comérnoslo.
Saludos!
«Que no se nos cierre el mundo y entonces podremos comérnoslo» – Definitivamente palabras de una oveja sabia.
Gracias So por compartir tu experiencia… Es muy cierto lo que dices: la seguridad del empleo es tan sólo un espejismo, el cual puede verse roto en cualquier momento sin que el empleado pueda hacer nada al respecto.
Te mando un fuerte abrazo
Un saludo todos y en especial para Mauricio.
Coincido con Miguel Gómez cuando menciona el miedo (al fracaso, al éxito, al “qué dirán”, al salir de la comodidad…) como una causa para no diversificar tus fuentes de ingreso. El miedo paraliza y la diferencia entre el emprendedor que emprendió y el emprendedor que simplemente soñó y nunca emprendió es el afrontarlo y salir adelante a pesar de él.
Hay que tener claro que optimizar el gasto es fundamental pero no es un un camino sin límite. Hay que buscar alternativas a reducir tu gasto y esa es la pregunta que nos plantea Mauricio.
Mis sugerencias no serán sobre un sector en particular.
Pasan por la formación en primer lugar. Reflexión y estrategia. Pensar hacia donde quieres ir. Con que cuentas para el viaje y sino dispones de las herramientas adecuadas, búscalas, fórmate, etc.
Cuando tengas claro el destino y cuentes con las herramientas, lo que necesitas es decisión, valentía, esfuerzo, dedicación, paciencia y algo de «locura» ya que los de tu alrededor tu tacharán muchas veces de insensato….
Identifica un target al que puedas dedicar un tiempo y recursos económicos limitados según tu perfil y dedícale todo tu esfuerzo. Preferible que sea hipersegmentado. Persevera. Haz networking. Establece alianzas. Comparte. Deja ganar a los demás, ellos te darán a tí.
Se generoso. Evita política y religión.
Sobre todo, trasmite emociones. Lo importante son las personas. Las empresas están formadas por personas.
Suerte a todos. Con prudencia nadie ha alcanzado sus sueños.
Fede, gracias por tu saludo.
Tus sugerencias son valiosas sin duda, lo único que te agradecería que amplíes un poco más es el concepto de «target hipersegmentado»… No estoy seguro de haber comprendido de forma precisa lo que quieres dar a entender.
Saludos desde el Mayab
Hola Mauricio,
Os un enlace donde se explica muy bien el concepto de la hipersegmentación de los mercados.
http://www.puromarketing.com/13/12605/hipersegmentacion-marketing-medida-para-consumidor.html
http://www.monografias.com/trabajos26/segmentacion-mercados/segmentacion-mercados.shtml
Tan solo, añadir que la gran transformación que estamos viviendo estos últimos años es tener conciencia que nosotros mismos, nuestra persona, nuestro nombre y nuestros conocimientos somos una empresa. Pero no una más, sino la primera empresa que debemos cultivar, hacer crecer y potenciar.
En cuanto nos veamos como una empresa, aplicaremos las técnicas financieras, de marketing, relaciones públicas, planificación estratégica, etc. de las empresas en nosotros mismos.
Las personas que vemos que han dado un cambio de rumbo a sus vidas es porque ellas planifican su vida profesional como una empresa, ellas son una empresa y se venden como tal. El cambio comienza por uno mismo. El sector al que te dediques depende de ti.
Saludos.
Fede, gracias por las ligas.
El concepto en sí es muy interesante, sólo que al llegar al punto de verte a ti mismo como una empresa me pregunto que tan sano puede ser… A qué me refiero:
Un excelente director de una empresa del sector privado puede fracasar rotundamente en el sector público, debido a que muchas decisiones se toman por motivos políticos, sociales o humanitarios ajenos a objetivos estratégicos o financieros.
Por otro lado, un excelente director del sector público podría fácilmente fracasar al toparse que tiene antes de repartir el presupuesto primero tiene que generarlo.
Siguiendo la misma lógica, ¿no podría ser que una persona con una gran habilidad para las finanzas personales le cueste trabajo interpretar las empresariales, y que un CFO viva al borde de la quiebra con múltiples deudas?
Hola Mauricio,
Para eso haces un DAFO, para ver sus puntos fuertes y tus puntos débiles.
Trabaja sobre los débiles y explota los fuertes. Si es necesario, busca compañeros (socios) que refuercen sus debilidades.
Para eso sirve la red de contactos.
Saludos.
He estado observando personas exitosas en lo que hacen y la clave es ya sabida por todos, pero no muy practicada : disciplina, no tener miedo , y ponerse metas MEDIBLES !
Mi jefe cuenta un cuentito cada vez que entrevista gente para el negocio..» Estaban tres sapos sentados en sus hojas en el estanque y uno pensó brincar al agua, cuantos quedaron en sus hojitas?……respuesta; los mismos tres!!!! pues solo lo pensó, no se atrevió y no lo llevó a cabo»……..El mundo es de los atrevidos…
Muy cierto Mónica, las metas medibles son importantes para lograr concretar los esfuerzos. Y el cuento del Sapo, genial. Confío que a tu jefe no le importe que lo parafrasee.
¡Éxito!
Excepcional artículo, Mauricio.
De todas formas, y según mi opinión, me gustaría añadir una reflexión al respecto.
Evidentemente le damos mucha importancia a nuestros ingresos, pero no debemos caer en el error de pensar que cuanto más ganemos mayor va a ser nuestra capacidad de ahorro y, por ende, nuestras posibilidades de creación de activos.
Personalmente, soy de los que piensan que la capacidad de ahorro que es la que luego nos va a permitir la creación de dichos activos tiene que estar basada en un pilar muy importante, y me atrevería a decir que mucho más que los ingresos: la optimización de nuestros gastos.
Casi todo el mundo sabe al céntimo la cantidad de dinero que ingresa al mes, pero casi nadie sabe con la misma exactitud cómo gasta ese dinero, por dónde se le escapan esos pequeños gastos que, por ser mímimos, no les prestamos atención, pero que sumados a lo largo del mes o del ejercicio suponen una cantidad realmente importante, y que si multiplicamos por 12 veremos lo que nos supone en un año.
Permitidme que os cuente una cosa.
Está estadísticamente comprobado que la gran mayoría de las personas que tienen la inmensa suerte de ganar una gran cantidad de dinero de golpe (sorteos, herencias, etc.) y que no tienen una cultura financiera adecuada (no controlan sus finanzas como deben, tanto ingresos, gastos, inversiones, etc), se vuelven a encontrar en el corto o medio plazo igual que antes o incluso peor. Me explico: Si tú ganas más y no usas tu cultura financiera para controlar, planificar e invertir ese dinero, tu ritmo de vida va a subir cada vez más, con el consiguiente aumento del gasto al que se le dará más o menos importancia mientras haya dinero en nuestra cuenta corriente. El problema viene cuando ese mayor o menor ritmo de vida y la falta de planificación se vayan comiendo ese capital. Volver luego a equilibrar nuestro nivel de vida y de gastos será muy difícil, y puede que las deudas que hayamos contraido por el camino nos dejen en una posición incluso peor que la que teníamos cuando llegó a nosotros todo ese dinero de golpe.
Por lo tanto y como COMPLEMENTO a tu planteamiento recomiendo la planificación y optimización de nuestros gastos. ¿Cómo? Os propongo un sencillo ejercicio:
1.- Toma un listado de todos tus gastos (recibos de suministros, domiciliaciones, hipoteca, préstamos personales, gastos diarios …) Un período de 6 meses es suficiente.
2.- Clasifica dichos gastos en uno de los tres grupos que te indico a continuación:
– INEVITABLES: Son esos gastos fijos que no puedes rebajar de ninguna manera: hipoteca, préstamos personales …
– MEJORABLES: Son esos gastos que, gracias a la ley de la oferta y la demanda, puedes rebajar al buscar en el mercado servicios iguales o similares pero a precio más bajo (suministros de agua, luz, teléfono, móvil, seguros …)
– EVITABLES: Son esos gastos que, si los borras de un plumazo no pasa absolutamente nada: el desayuno de todos los días en la cafetería lo puedes sustituir por el desayuno en casa, salir con los amigos de copas por reuniones en casa … No estoy diciendo que «renuncies a los placeres de la vida», simplemente que estudies opciones de rebajar esos gastos.
Una vez que hagas esto de forma REALISTA puede que, además de ver que es posible mejorar tu capacidad de ahorro con la misma cantidad de ingresos, y por lo tanto crear esos activos paralelos que inyecten ingresos en tus bolsillos GANANDO EXACTAMENTE LO MISMO, te lleves una muy grata sorpresa de todo el dinero extra que podrás ahorrar después de hacer este ejercicio.
Y ahora sí. Ahora es el momento de poner a funcionar nuestra inteligencia financiera y obtener el máximo rendimiento posible de nuestros ahorros. Pero eso ya sería tema de otro comentario …
Un saludo y muchísimas gracias por tu EXCEPCIONAL trabajo y todo el aprendizaje que nos ofreces.
Andrés López.
Director de MaestrosenInversiones.com
Coincido con muchos de los comentarios. En mi experiencia como asesor de inversiones me ha tocado ver de todo, y en resumen puedo decir que no hay negocio malo, depende mucho de factores como el compromiso, las habilidades, el timing y hasta un poco la suerte. Personas con ideas que podrían sonar absurdas o demasiado logicas han tenido exito, mientras que otras que sonaban muy bien en papel no pasaron de unos meses.
Formas de diversificar los ingresos hay desde pasivas (inversiones en bolsa o socios capitalistas en algún negocio entre otras cosas) hasta las activas (bienes raíces, poner un negocio, network marketing, etc) pero el error de muchas personas es que no planean a largo plazo, con las primeras ganancias se dan un gusto «por que se lo merecen» y terminan con mayores deudas. No reinvierten o se dedican a «ordeñar» el negocio que acaban de poner sin darle tiempo de madurar, en palabras de Carlos Kasuga es como si a un niño recién nacido le pidamos que nos mantenga, en lugar de cuidar de el hasta que sea autosuficiente.
Cuesta dar la primer paso a la diversificación, sobre todo vencer la inercia y la zona de confort, pero mientras mas pronto se decida uno obtiene mayores beneficios.
Otra observacion, el tema es «generar un nuevo ingreso» y no «ser empleado o empresario». Un empleado puede tener un ingreso extra ya sea con otro trabajo, un negocio que pueda atender en su tiempo libre o con inversiones en bienes raices o instrumentos financieros sin tener que dejar su empleo. Lo mismo de un empresario que tiene las mismas opciones para contar con dos (o mas) entradasnsin depender al 100% de solo una.
Sergio, tus observaciones son muy acertadas. Sin embargo, el concepto del «timing» quizá no sea manejado por el muchos de los lectores. ¿Podrías ampliar tu comentario comentándolo?
Por otro lado, me gustaría subrayar tus palabras: Diversificar ingresos no significa poner un negocio y dejar de trabajar como empleado, si no de tener diferentes entradas de dinero que te permitan no depender al 100% tan solo de una.
Gracias!
Hola que tal Mauricio
A veces nos topamos con comentarios negativos de nuestra propia familia, muchos son generados por el miedo a lo desconocido y sobre todo por la creencia de que teniendo un sueldo seguro es lo mejor y que tener tu propio negocio o tener otra fuente de ingresos, trae más problemas que soluciones.
Creo que aquí lo importante sería cambiar la mentalidad y sobre todo informarse y ahora más que nunca es sencillo gracias a blogs como este y que existe bastante información en la red.
Saludos
Muy cierto Silvia…
Si bien es cierto que la familia es lo más valioso que puede llegar a tener un individuo pudiendo ser una sólida plataforma para su desarrollo, también puede convertirse en un lastre y aún llegar a destruir a la persona.
Diálogo, comprensión, tolerancia, lealtad… Valores que sirven para integrar a los miembros de la familia y mantener vivo el amor entre sus miembros. Pero en ocasiones se ven obscurecidos por los propios temores, por el estrés, la rutina… y los problemas económicos.
Gracias por tu aportación