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El tiempo, tu más valioso recurso

Mauricio Priego 23/Jul/2011 3

– “Les recuerdo que este pendiente es muy importante”

– “Claro señor, no se preocupe, nosotros nos encargamos. ¿Para cuando lo necesita?”

– “Es para ayer”…

 ¿En cuantas ocasiones no has participado en un diálogo semejante? ¿Cuántas veces has sido tú mismo el que has expresado que algo “era para ayer”?

No hay recurso más importante que tengas que el tiempo. El dinero, las inversiones, tu capacidad crediticia, y aún tu salud y tu propia fuerza laboral, están supeditados al tiempo del que dispones. Y éste es un recurso limitado, no renovable, el cual no puede almacenarse, ni puede obtenerse o conseguirse más de él, al cual se limita tu propia vida… y es el más fácil de perder, escapándosete de las manos.

 Sin embargo, el tiempo puede invertirse para generar riquezas, teniendo tú la opción de determinar su naturaleza…




 Por un lado está la riqueza que te da la amistad sincera, el tener cerca a personas que vitorearán tus logros y extenderán su mano para ayudarte en los obstáculos.

 Por otro, está el alcanzar un puesto importante y reconocido en tu trabajo, lo cual te permitiría tener liquidez, reconocimiento de tus colegas y satisfacer tus deseos de superación.

 No olvidemos el tesoro que es el verdadero amor de pareja, forjado a través de pruebas, comprensión y cariño, el cual surge de las cenizas a que queda reducida la pasión cuando es devastada por la rutina, y sin embargo te brinda un alma sincera que te acompaña iluminando tu andar por el sendero de la vida.

 Y que decir de los hijos, esos pequeños ángeles prestados que son un regalo de esperanza, y quienes más que nadie son sensibles a tus decisiones respecto a la inversión que haces del tiempo.

 Tu tiempo y dedicación igualmente pueden fructificar en jugosos negocios y atinadas inversiones, que te permitan disfrutar de los bienes materiales y aún compartirlos con aquellos que lo necesitan.

 Finalmente, tu inversión del tiempo puede brindarte un alma tranquila, en paz, satisfecha por haber servido a tus semejantes y a la construcción de un mundo mejor, alimentada por la lectura o el disfrute de las artes, nutrida por la serena contemplación del amor de Dios.

 Sabemos que existen más formas de invertir tu tiempo, no estando en mí decirte cual de todos los posibles dividendos a recibir serán para ti los más redituables. Lo que sí puedo decirte es que sólo puedes concentrarte en una cosa a la vez, y aquello que sea lo más importante para ti en tu corazón será a lo que inviertas más tiempo conciente o inconcientemente, cosechando finalmente los frutos de lo que siembres.

 Por tanto, si te capacitas e inviertes para aprender a utilizar herramientas, instrumentos y mejores prácticas que te permitan obtener los mayores beneficios de tus otros recursos, dedica una tarde soleada en algún lugar apacible que te invite a meditar con tranquilidad, en determinar que es lo que realmente quieres… y actúa en consecuencia.

 Los gente sencilla del campo lo sabe: para obtener un fruto primero tienes que sembrar la semilla, y después dedicarle pacientemente el tiempo que sea necesario para cuidarla y protegerla mientras germina, crece, florece y sus frutos maduran. Pretender tener el fruto antes de sembrar la semilla es absurdo.

 Si a alguno de ellos le dices al inicio de la siembra que la cosecha era para ayer, simplemente te mirarán a los ojos, con sabiduría y complicidad en la mirada, sonriendo ante lo que consideran que seguramente es una broma.

3 Comentarios »

  1. Elizabeth Padilla 11/Feb/2015 en 2:35 pm - Responder

    Pufff! con el dedo en la llaga.

    • Mauricio Priego 12/Feb/2015 en 8:30 am - Responder

      Así es Elizabeth… El tiempo es nuestro más valioso recurso, el único que en realidad no podemos recuperar de ninguna manera y que tampoco podemos ahorrar para utilizar después… Y sin embargo es el que más fácilmente desperdiciamos. En ocasiones sólo es necesario tener al alcance el celular para perdernos viendo cientos de videos cortos «graciosos» o enajenarnos en un juego… No podemos ahorrar tiempo, pero si podemos invertirlo en actividades útiles y constructivas, así como aprovecharlo mejor a través de realizar de forma más eficiente nuestras rutinas y tareas 😉

  2. Garessi03 25/Ene/2012 en 4:35 am - Responder

    Con todo respeto, pero, para obtener fruto, PRIMERO hay que escoger el terreno, después preparar y abonar la tierra y posteriormente, sembrar la semilla. Recuerde el pasaje en la Biblia del Grano de Mostaza.

    Saludo afectuoso.

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